¿Cómo se le pide perdón a un amigo?

Años… Mucho tiempo había pasado sin vernos hasta que salimos a cenar con nuestras parejas. Todo transcurría bien, la conversación fluía amena, hasta que decidí mencionar un tema delicado: la política.

Recuerdo que al principio mi amigo no mostró señales de molestia. Hablamos de ello con calma; bueno, la que nos permitía el bullicio de la tasca. Sin embargo, al poco tiempo percibí un ligero cambio en su mirada y el surgir de un comentario a media voz, apenas perceptible, que me hizo darme cuenta de mi error. Había tocado uno de esos temas que, como el sexo y la religión, deben evitarse en una conversación entre amigos.

Lo veo ahora en retrospectiva: fui imprudente. Quise compartir mis opiniones sin considerar cómo podrían afectar a mi amigo, y me di cuenta de que ese tema podría estar causándole más de un malestar en su vida.

Ocasionalmente la noche siguió, y nos despedimos junto con el cierre del bar en el que tomábamos una copa.

Sé que hablar de política puede ser como añadir gotas de hiel y echar a perder una buena comida, especialmente en estos tiempos convulsos.

PERDONA por tanto este error, amigo. La próxima vez nos centraremos en disfrutar de esos encuentros que, como la vida, se consumen en breves y gratos instantes.

Rara vez conseguimos mantener el contacto con algún viejo amigo de la infancia. Distintas trayectorias en nuestras vidas, distintas experiencias… Aun así, en nosotros se mantiene ese silencio vivo que nos trae en una mirada recuerdos de nuestra niñez.

¿Que cómo se pide perdón a un viejo amigo?

-Perdona, amigo mío. Mantengamos nuestro trato, dispuesto a perpetuarse o apearse cuando no dé de sí un trato libre de prescripciones y prejuicios, alguna comprensión más profunda de las cosas y unas buenas risas.

Hasta la próxima, amigo, si así ha de ser.

Es nuestro tiempo

Estamos viviendo el periodo en que la Humanidad ocupa más tiempo interactuando frente a una pantalla que ante otra persona.

En esta interacción hay flujo de información y se generan ciertas emociones, pero se pierde el cariz del contacto íntegro con otro ser vivo; el mismo contacto perceptivo y sensorial que sucede de manera natural entre el resto de seres vivos.

El desarrollo tecnológico que tanto nos ha ayudado y brindado poder, se ha ido empoderando en nuestra vida de manera exponencial.

¿Qué hacer entonces? ¿Quién tiene el poder para decidir qué hacer? ¿Quién se plantea esta realidad siquiera?

Sin embargo, lo obviemos o no, esta década que vivimos marcará un antes y un después en lo que ha sido hasta ahora toda nuestra historia.

Surgen creencias, prejuicios, dudas y quizás lo más importante y necesario: preguntas abiertas que nos invitan a ahondar en la incógnita que generan.

Es nuestra elección abrirnos a este trascendental dilema. Es también nuestra responsabilidad porque es en nuestro tiempo cuando está sucediendo.

Es nuestro tiempo porque lo que consigamos, sea «bueno» o «malo», será el legado que entregaremos a quienes hayan de venir.

Es nuestro tiempo

Libertad, Igualdad, Fraternidad, Raciocinio y Amor

“Ni antes ni ahora, ni posiblemente jamás. Ninguna sociedad te liberará nunca de tus propias cadenas. Muy al contrario: te confundirá y debilitará lo máximo que pueda para que resultes más sumiso y moldeable a sus intereses. Nada ni nadie, salvo tú, tiene la oportunidad de sentir en ti la gozosa libertad que brinda saberse uno con la existencia. Para buscarla por ti mismo tendrás que armarte de paciencia, persistencia y valor, pues la búsqueda no será de un objeto exterior sino de tu más íntima y genuina esencia. Al fin y al cabo, ¿quién sino tú puede hallar los tesoros que aguardan en tu universo interior?”.

El viaje de Riddhi

Vivimos un periodo histórico tan trascendental para la humanidad como lo fue en su momento la Revolución francesa.

Hace dos siglos, el pueblo francés se alzó contra la tiranía de un sistema feudal que los condenaba sin alternativa a la explotación y la miseria. Los súbditos franceses prefirieron arriesgar sus vidas antes que continuar con la “normalidad” que les había impuesto su sistema; es decir, una vida sin más derecho que trabajar de sol a sol para poder cumplir con las duras imposiciones tributarias y una única meta: subsistir hasta morir. Continúa leyendo Libertad, Igualdad, Fraternidad, Raciocinio y Amor

«Lo que buscas ya lo eres» – Sergi Torres

“Lo que buscas ya lo eres”. Esta podría ser una de las frases que resumen el mensaje de Sergi Torres. Sus palabras señalan la necesidad de reaprender a estar presentes en la vida, en nuestra vida, tal y como nos sucede.

Aprendemos desde críos a desear lo que nos gusta y repeler lo que nos disgusta. Ese comportamiento se va enraizando en nuestra forma de vernos a nosotros mismos y a nuestra vida. Así, muchas veces caemos en el error de “no vivir”; es decir, de vivir anhelando un hipotético futuro en el que se den las condiciones que creemos necesarias para que, por fin, podamos aceptar del todo nuestra vida. Esta actitud vital es como el truco que se usa para que el borrico avance, poniéndole a la vista una sabrosa zanahoria (zanahoria que siempre estará a un paso más allá de donde se encuentra). Continúa leyendo «Lo que buscas ya lo eres» – Sergi Torres

«Tu corazón conoce el camino. Corre en esa dirección» – Rumi

Una de las frases que aparecen en este video dice: «El amor y la compasión son necesidades, no lujos. Sin ellas, la humanidad no puede sobrevivir». Su autor es el Dalai Lama.

En esta época que nos ha tocado vivir se está haciendo patente esta realidad.

Algunos apuntan que como Humanidad estamos involucionando. Es decir, estamos perdiendo los valores más nobles que ancestralmente nos han definido por lo que somos: seres humanos. Continúa leyendo «Tu corazón conoce el camino. Corre en esa dirección» – Rumi

Cómo te lavan el cerebro sin saberlo

Un excelente documental de la serie «Redes”.

Eduard Punset entrevista a Kathleen Taylor, científica de investigación en el Departamento de Fisiología, Anatomía y Genética en la Universidad de Oxford. Gracias a ella conoceremos hasta qué punto nuestra mente es tan fácilmente manipulable.

De hecho, según la científica, nuestro aparente “yo” es en última instancia una idea de nosotros mismos. Una idea que nos permite ser más eficientes y no caer en el caos tras cada despertar.

En última instancia, esa idea de quien creemos ser es también eso: una creencia. Continúa leyendo Cómo te lavan el cerebro sin saberlo

La soledad que nos une

 

«Naces solo y mueres solo, y en el paréntesis la soledad es tan grande que necesitas compartir la vida para olvidarlo».

Erich Fromm

La palabra «soledad» suele despertar tristeza. Para muchos es sinónimo de sufrimiento, aburrimiento, vacío, fracaso, locura. Quien vive en soledad debe padecer alguna inestabilidad mental que le impide socializar.  Socialmente el solitario es un ser extraño. Quizás por eso la inmensa mayoría de las personas viven sus vidas rodeados de individuos para evitar cualquier circunstancia que les confronte con su estado natural de soledad. Continúa leyendo La soledad que nos une

«Soul» – El Cielo está en Ti

Comparar obras de distintas épocas suele conducir a valoraciones injustas. Aun así, salvando las distancias de contenidos, pretensiones y épocas, “Soul” puede ser considerada como el proyecto “Fantasía” que abordó el propio Walt Disney hace unos ochenta años. Si bien aquella obra era una recreación visual en el que la música clásica servía para hilvanar una serie de composiciones visuales extraordinarias, “Soul” trata de abordar el aspecto inmaterial de nuestra existencia. Para ello se vale de la última tecnología digital y de una creatividad artística y visual sin parangón. La música también fundamenta su contenido, si bien se centra en el mundo del jazz; entendido como una manera de expresar mediante la música al “ser interior”. Continúa leyendo «Soul» – El Cielo está en Ti